25 abril 2023

La pandemia que puede acabar con la humanidad se llama "Infertilidad"

25 abril 2023

- Todos sabemos que la descendencia en los llamados países desarrollados a los que también llamamos mundo global está descendiendo de una forma notable y preocupante. Hay quien dice que la extinción de la humanidad empieza por ahí pues una de cada seis personas adultas, actualmente, padece esterilidad en el mundo.

- Hoy analizamos la situación aportando un artículo que nos habla de ello.
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Infertilidad, la pandemia que "puede ser más peligrosa que el Covid para la humanidad"

VICTORIANO MULERO
NOTICIA25.04.2023 - 08:50H

Se diagnostica ante la imposibilidad de conseguir un embarazo tras mantener relaciones sexuales habituales como mínimo doce meses sin usar métodos anticonceptivos.

El estilo de vida actual desincentiva la reproducción - Getty Images/iStockphoto

Victoriano Mulero Méndez - Catedrático de Biología Celular

Ahora que la covid-19 empieza a estar bajo control, la infertilidad aparece en el horizonte como una nueva pandemia que puede ser todavía más peligrosa para el futuro de la humanidad. Según la Organización Mundial de la Salud, una de cada seis personas adultas padece esterilidad en el mundo.

Se habla mucho de los problemas demográficos y económicos que supondrá la baja natalidad en los países occidentales en un futuro cercano, y de cómo el estilo de vida actual desincentiva la reproducción. Sin embargo, la población apenas está informada sobre las causas de los problemas de fertilidad que truncan los planes de muchas personas que sí deciden tener descendencia pero no pueden.

Además, casi ningún sistema de salud público del mundo financia las soluciones disponibles actualmente para prevenir, diagnosticar y tratar la infertilidad, por lo que las personas afectadas tienen que afrontar unos gastos elevadísimos.

¿Por qué se produce?

La infertilidad se define como una enfermedad del sistema reproductivo, femenino o masculino. Se diagnostica ante la imposibilidad de conseguir un embarazo después de mantener relaciones sexuales habituales como mínimo doce meses sin usar métodos anticonceptivos.

Sus causas son múltiples, y entre ellas se encuentran la edad (la fertilidad femenina disminuye gradualmente a partir de los 30 años); factores ambientales como el estrés, la contaminación, el consumo sustancias tóxicas o la depresión; o las infecciones de transmisión sexual, desencadenadas por diversos virus, bacterias y hongos.

Tampoco hay que olvidar los factores genéticos y las patologías derivadas de ellos. El envejecimiento de los ovarios, el daño testicular asociado a varicocele (dilatación de las venas del escroto), la endometriosis, el síndrome del ovario poliquístico o el aborto espontáneo de repetición son solo algunos ejemplos de estos trastornos que dificultan la reproducción. Y todos tienen un punto en común: la inflamación desempeña un papel muy importante.

Y aquí llega el inflamasoma

La inflamación es una respuesta inmunitaria normal de una parte de nuestro cuerpo a una herida, lesión o infección. Este proceso suele acabar al poco de producirse el daño, ya que en caso de mantenerse durante un tiempo prolongado puede ocasionarnos los inconvenientes ya conocidos de las enfermedades inflamatorias crónicas. Hoy se sabe que mantener el equilibrio entre los mediadores que promueven y evitan la inflamación es fundamental para mantener una fertilidad efectiva.

Teniendo en cuenta las bases moleculares de todos los procesos inflamatorios que pueden afectar a nuestra capacidad de reproducirnos, la contribución del inflamasoma es la que más inadvertida ha pasado durante años. Hablamos de un complejo formado por el ensamblaje de muchas proteínas que se encuentra en el citosol, el líquido interno de nuestras células.

El inflamasoma forma parte de nuestro sistema inmunológico innato, y su función es activarse cuando reconoce señales de daño o infección e iniciar procesos inflamatorios como respuesta. Clasificado en distintos tipos según cuál sea la proteína “sensora” que identifica dichas señales, el NLRP3 es el más conocido y estudiado.

Puesto que los inflamasomas juegan un papel fundamental en la iniciación de las respuestas inflamatorias, cualquier alteración en su funcionamiento puede llevar al desarrollo de enfermedades. Y son precisamente esos desequilibrios en la actividad del NLRP3 los que se han asociado a la aparición de dolencias inflamatorias, como las anteriormente citadas, que afectan a nuestra fertilidad.

La activación excesiva de este inflamasoma produce piroptosis, un tipo de muerte celular programada en respuesta a patógenos intracelulares que genera una gran cantidad de factores proinflamatorios.

Cuando el NLRP3 “sobreactúa”

Diversos estudios han puesto de manifiesto que la 'sobreactuación' del inflamasoma NLRP3 juega un papel importante en varios procesos relacionados con la reproducción, como los siguientes:

  • El aumento de la expresión de NLRP3 con la edad favorece el envejecimiento ovárico en las mujeres.
  • Su hiperactivación como consecuencia de la desregulación de las hormonas sexuales potencia el desarrollo de la endometriosis.
  • El síndrome de ovario poliquístico también sobreactiva el NLRP3, lo que acelera la fibrosis ovárica y afecta a la maduración de los folículos ováricos.
  • Se ha detectado un incremento significativo en la expresión de NLRP3 en el tejido endometrial de mujeres con aborto espontáneo de repetición y en el plasma de embarazadas con diabetes gestacional.
  • Y, por último, la activación anormal de este inflamasoma se vincula a casos de parto prematuro daño testicular asociado al varicocele, preclampsia –caracterizada por la aparición de hipertensión y signos de daño hepático o renal después de la 20ª semana de embarazo– y disminución de la motilidad y producción de los espermatozoides.

En resumen, el inflamasoma desempeña un papel fundamental en el origen de muchos trastornos inflamatorios asociados con un aumento de la infertilidad, tanto en hombres como en mujeres. Entender cómo actúan estos elementos del sistema inmunológico será esencial para buscar nuevas dianas terapéuticas y tratamientos.

**En el artículo también han participado, Sylwia Dominika Tyrkalska, Antonios Georgantzoglou, Carmen Álvarez Santacruz y Sergio Candel Camacho**



@etarragó


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6 comentarios:

  1. El mundo esta super poblado es la defensa de la tierra. Te mando un beso.

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    1. Yo, más que superpoblado, Judit, creo que la población está muy mal repartida y, además, se concentran los egoísmos en una parte del planeta que es en el llamado mundo global, donde los jóvenes no quieren adquirir la responsabilidad de ser padres pues prefieren vivir ellos y luego está la otra parte del planeta en que tener hijos es casi una obligación, Al final sucede que la mitad del Planeta quiere ir a vivir a la otra mitad del mismo.
      Es un problema que la humanidad deberá resolver y pronto.
      Un abrazo, escritora.

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  2. Será cuestión de hacerse estudios si se ve que al intentarlo no se logra, gracias Enrique, un abrazo!

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    1. El tipo de alimentación yla tardía edad de gestación también tiene que ver, María Cristina. Los jóvenes de hoy prefieren vivir su vida antes que condenarse a tener que cuidar, mantener y educar a sus hijos. Hay quien dice que no hay alicientes suficientes para que se prefiera gestar antes que vivir libres de cualquier responsabilidad.
      Un verdadero problema el que se quedará para resolver por las nuevas generaciones.
      Feliz miércoles.

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  3. A mí, estas cosas, me quedan ya algo lejos... Además, la experiencia dice que las gentes que vienen de Africa o Asia se reproducen de manera incansable... Supongo que ellos nos sustituirán... Nosotros estamos muy ocupados con los veganismos, naturalismos, odios a los vecinos...

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    1. Así es, Ildefonso, lo mismo piensan los políticos europeos en general y los jóvenes en particular, donde vivir bien es lo primero.
      Un abrazo, maestro.

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