10 noviembre 2023
- Hoy me he puesto sentimental leyendo un artículo en el que se hablaba de la mejoría en la salud que experimentan los abuelos cuando son visitados por sus hijos y nietos. Me ha gustado y aquí lo dejo:
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Visitar a tu abuela una vez al mes puede aumentar su esperanza de vida
Un estudio basado en 400.000 personas asegura que las personas mayores que reciben visitas de familiares y amigos frecuentemente tienen un 39% menos de posibilidades de morir
Una mujer joven saluda a una anciana. GUVENDEMIR (GETTY IMAGES)
Madrid - 10 NOV 2023 - 05:20 CET
Es una mujer blanca de 62 años. Vamos a llamarla María. Vive en Estados Unidos y tiene un trabajo nocturno, lo que hace un poco difícil socializar. Ayer se acostó a las cuatro de la madrugada y hoy se ha despertado a las nueve. Podría seguir durmiendo, pero no quiere, o igual se ha desvelado. Enciende la tele, están dando un programa religioso. Le parece bien, María ve mucho la tele. Allí siempre pasa algo. En su día a día, no. No tiene hijos ni amigos cercanos. No es especialmente sociable, así que llena sus días con programas, realities, noticieros y películas. Con vidas ajenas. Cuando termina la retransmisión religiosa, María hace algo de zapping y se queda embobada viendo otro programa. Y otro. Una película. Sin saber cómo, son las 17:45, así que se prepara algo de cenar. Después limpia la casa, descansa un poco y se queda traspuesta. Ay, que se le ha hecho tarde. Se ducha a toda prisa y se arregla. Son las 10.45 de la noche y tiene que salir para el trabajo.
Esto sucedió un día concreto de su vida, pero podría ser ayer, podría ser cualquier día. Esa es su rutina. María tiene una salud autopercibida razonablemente buena, pero no es feliz. Si le preguntaras, te diría que su nivel de felicidad es un dos sobre diez. Es lo que contestó al American Time Use Survey una macroencuesta sobre el uso del tiempo que el Gobierno estadounidense lleva haciendo desde 2003. En estos 20 años, han constatado que el caso de María no es único. De hecho, la soledad se ha convertido en una experiencia mucho más frecuente en las últimas décadas, y se ha visto potenciada por la pandemia. Y esto es un problema no solo social, sino sanitario. A pesar de que María piense que su salud es buena, tiene un 39% más posibilidades de morir que una persona de su misma edad, sexo y condición, pero con más conexiones sociales.
Esto es lo que asegura un estudio científico publicado hoy en la revista BMC Medicine. La idea no es nueva; distintos estudios han señalado esta evidencia en los últimos años, pero pocos lo han hecho con la contundencia y concreción de este. En lugar de hablar de soledad en general, ha diferenciado entre la soledad objetiva y la subjetiva; la que proviene de un aislamiento de relaciones epidérmicas y de aquellas más intensas, las que mantenemos con amigos cercanos y familiares. Ha tenido en cuenta lo cualitativo, pero también lo cuantitativo. Y ha llegado a la conclusión de que en esta vida, lo más importante es ver a la familia y amigos cercanos. Y que con una visita al mes es suficiente.
“La verdad es que no era lo que esperábamos encontrar”, confesó el cardiólogo Jason Gill, uno de los autores del estudio, durante su presentación, que se celebró hace unos días por videoconferencia. “Pero parece claro que hay un efecto umbral. Una vez que empiezas a ver a tus amigos y familia mensualmente, el riesgo se mantiene bastante estable. Da igual que sea una visita mensual, semanal, varias veces a la semana o todos los días”, señaló. Hay que ser sociable, sí, pero no es necesario serlo demasiado, al menos desde el punto de vista de la salud y estrictamente instrumental. “Verlos con más frecuencia no te da ningún beneficio adicional”.
Para realizar el estudio se utilizaron los datos de 458.146 adultos reclutados en el Biobanco del Reino Unido, una enorme base de datos biomédicos disponible para ensayos científicos. Los participantes fueron reclutados entre 2006 y 2010 y tenían entonces una edad media de 56,5 años. 13 años después, 33.135 de ellos habían muerto. Los autores cotejaron las defunciones con las respuestas que habían dado a una serie de preguntas sobre la soledad y armonizando factores como edad, sexo, situación socioeconómica y enfermedades previas. Llegaron entonces a una conclusión demoledora: la soledad mata.
Artículo completo: https://elpais.com/salud-y-bienestar/2023-11-10/visitar-a-tu-abuela-una-vez-al-mes-puede-aumentar-su-esperanza-de-vida.html
Siempre es bueno dar amor . No importa la edad. Y más si son ancianos. Te mando un beso.
ResponderEliminarAl parecer es importante, Judit. Es cierto y hablo por mí, que nosotros cuando vemos a nuestros nietos se nos quitan muchos de nuestros males o, al menos, ya no pensamos en ellos.
EliminarUn fuerte abrazo, escritora.
De acuerdo, amigo... Es imprescindible, creo...
ResponderEliminarFeliz fin de semana
Así es, Ildefonso, doy fe de ello.
EliminarUn fuerte abrazo, maestro de la fotografía.
Para hablar en general, es muy triste. En estos días me toca ver un caso cercano. Y se trata de una vecina que está sola, demacrada, parece un fantasma, tiene alguna sobrina con quien no se lleva bien, podría acercarme a ella y acompañarla, si no fuera porque ella visitaba mi casa en vida de mi marido y cuando yo no estaba. No puedo hacer de tripas corazón, un abrazo Enrique!
ResponderEliminarLa vida, demasiadas veces, se muestra d euna forma muy cruel, María Cristina.
EliminarUn fuerte abrazo.
Creo que quizás la sensación de soledad es mayor en ciudades grandes que en pequeños pueblos en los que se relaciona mas las personas. Aunque la televisión corto mucho esas reuniones, en especial en buen tiempo, a la puesta de sol.
ResponderEliminarSaludos.
Tienes razón, Tomás, no obstante la mayor soledad la produce el olvido de los descendientes. Conozco casos sangrantes.
EliminarUn abrazo, amigo.